Familia Salesiana de Argentina
La Obra de Don Bosco se integra a todos los que trabajan por el bien de los jóvenes de la Argentina y del mundo. Quiere prestar un servicio a los chicos pobres, abandonados y en peligro, preocupándose y ocupándose de su formación humana integral.
¡Somos Salesianos! Religiosos y laicos, adultos y jóvenes, que queremos trabajar por y con los chicos y chicas más necesitados de nuestro país.
En qué Creemos
Estamos convencidos que la educación es un elemento de transformación y de inclusión social. Y que –como nos decía Don Bosco- todos los jóvenes guardan una chispa de bien, aún el más problemático. Es desafío de los adultos el buscar y trabajar para que esta chispa no muera, sino que crezca y se desarrolle.
Sabemos que los jóvenes son, ante todo, el presente, porque si en el presente no desarrollan sus talentos y cualidades en todas las dimensiones de la vida, su futuro y el de la sociedad donde viven se verá comprometido.
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Qué hacemos
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La Obra de Don Bosco lleva a cabo acciones y proyectos socio-educativos, de contención y recreación, destinadas principalmente a niños, adolescentes, jóvenes en riesgo y sus familias, organizada en dos grandes Regiones (Argentina Norte y Argentina Sur).
Entre otras cosas, la Obra Salesiana anima y acompaña:
-131 Casas Salesianas
-479 parroquias y capillas
-68.325 alumnos en 245 escuelas, institutos terciarios y Facultad
-5.959 alumnos en 46 Centros de Formación Profesional
-9.179 docentes, instructores y agentes educativos
-Más de 700.000 exalumnos a lo largo de la Argentina
-Más de 20.197 jóvenes en 361 grupos juveniles, misioneros, batallones y oratorios
-12.917 chicos y jóvenes en centros para Niños y Adolescentes en riesgo y centros alimentarios
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Cómo lo hacemos
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Las acciones se realizan partiendo de las características y particularidades de cada región, de las necesidades y potencialidades de los jóvenes, y de las posibilidades locales de gestión y animación.
Para concretar las acciones y proyectos son necesarios insumos, materiales, personal, infraestructura, tiempo y otros recursos económicos, que se logran con el aporte que cada uno puede ofrecer desde el lugar en el que se encuentra.
Así, muchos de estos recursos son conseguidos en las propias obras salesianas, y otros son aportados por Bienhechores y Bienhechoras, que son personas que realizan su aporte individual, y por Entidades Públicas y Privadas -Empresas y Fundaciones-, quienes brindan diversos aportes en especies o recursos económicos, para poder desarrollar estas acciones y proyectos en bien de los niños y jóvenes más necesitados, convencidos de que “La educación hace el cambio”.
